Reflexiones: Sami El Mushtawi |
El DUA es adoración a Allah. Él nos ha pedido invocarle y debemos acatar esta orden divina. Junto con ello, el DUA es alivio de la congoja, tristeza y preocupación. Gracias a él, el musulmán se siente bien y sus problemas se allanan. En el DUA, el creyente invoca a Allah demostrándole que el hombre es un ser débil y reconociendo a la vez su necesidad del Creador. El Corán dice: si te preguntan, Muhammad, diciendo: ¿Está Dios cerca de nosotros?, respóndeles: Yo estoy más cerca de ellos de lo que suponen, y la prueba de ello es que el ruego de Mis siervos llega en el instante preciso, que me invoquen y yo les responderé. (2:186).