Reflexiones: Sami El Mushtawi |
El mayor y más bendito deleite de la vida se encuentra en una buena esposa, por eso el musulmán se preocupa por el bienestar de su esposa y de su familia. El buen musulmán es el que aplica las sabias palabras del Profeta que, en su último sermón durante la peregrinación dijo: “Vosotros tenéis derechos sobre vuestra esposa y vuestra esposa tiene derechos sobre vosotros. Tratad a vuestras esposas con amor y gentileza; es verdad que las habéis tomado como un encargo de Dios y las habéis hecho legítima con la palabra de Dios; sed siempre fieles al encargo que os confía y evitad los pecados”.
Quiera Dios que se lleven a cabo estas loables enseñanzas del Profeta del Islam.