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| Reflexiones: Sami El Mushtawi |
Todos los actos y palabras, si se manifiestan exclusivamente por Allah y como forma de complacerle, se convierten en actos de adoración. Cuando trata con cariño a sus padres, el musulmán está adorando a Allah como relató ‘Abdul-lah Ibn ‘Amru Ibn ‘Al ‘As, que Allah esté complacido con él, quien dijo:
“Llegó un hombre ante el Mensajero de Allah, y le pidió ir al Yihad; el Profeta le dijo: “¿Están vivos tus padres?”. El hombre le respondió: “Sí”; le dijo: “Entonces esfuérzate con ambos”. Los esfuerzos por educar y orientar a nuestros hijos, transacciones comerciales, el matrimonio, toda acción lícita y voluntaria que se realiza para complacer a Allah se convierte en un acto de adoración sobre el cual nos recompensará Allah. Quiera Dios que siempre tengamos presente hacerlo todo por y para Allah.