domingo, 23 de febrero de 2014

Viva la experiencia Dr. Sami El Mushtawi

Para saborear la dulzura del Islam, por favor vívalo por dentro. Métete entremedio de los musulmanes, reza con ellos y comparte con ellos. Para saborear la dulzura del Islam, no leas sobre el mismo, solamente, sino véalo en práctica, en acción. Vívalo. Te cuento una historieta que refleja lo que te acabo de decir: una vez, un literato fue a ver una exposición de un destacado pintor. El literato clavó la vista en un admirable cuadro de una tormenta. Llamó al pintor y le preguntó cómo ha pintado magistralmente el cuadro. El pintor le contesto de la siguiente manera: no hice nada fuera de lo común, solo viajé hasta la orilla del océano, alquile un pequeño barco, pedí que me acercaran lo más próximo posible al preciso lugar en que estallaría la tormenta. El barco fue anclado en el preciso lugar. No tardó-la tormenta- en llegar. Con el sol ya refugiado tras el horizonte, se fue formando una estela nubosa. Un tremendo viento comenzó a sacudir una y otra vez el pequeño barco. Pronto estallaron el trueno y el relámpago y ya estaba metido entremedio de la tormento. Recién ahí pedí que me devolvieren una vez más a la orilla y ahí me puse a pintar el cuadro que te atrapó a ti”.