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| Reflexiones: Sami El Mushtawi |
Conmovido por una enorme tristeza, debo deciros que todo lo que se dice de justicia, de cooperación; del apoyo a los oprimidos y del auxilio a los desamparados… etc., se ha reducido a meras palabras vacías y sin ningún sentido.
Cuesta ver que los no musulmanes están abriendo sus puertas a los refugiados, y los musulmanes no. Es difícil imaginar que los no musulmanes sean más sensibles ante la tragedia de los hermanos sirios, y los musulmanes no.
Quiera Dios que sean llevados a la práctica los discursos elocuentes que se dictan desde el púlpito y que se encuentran en boca de todos.