viernes, 2 de enero de 2015

Jutba 02/01/2015


Jutba:Traducción de la Jutba del viernes
02/01/2015 – 12/3/1436

Amar al mensajero de Allah es una de las bases de la fe
Alabado sea Allah, Señor del Universo Quien dijo: ¡Profeta!, te hemos enviado a la gente llevando el mensaje del Islam, para ser testigo de la verdad, para anunciar las buenas nuevas a los creyentes, y para que adviertas a los incrédulos. (33:45) y dijo: Vosotros, los destinatarios del mensaje, debéis creer en Dios y Su Enviado, y debéis exaltarlo por medio de loas y alabanzas; no le atribuyáis lo que no corresponde, haced así de día y de noche. (48:9). Atestiguo que no hay otra divinidad excepto Allah, Único, Quien no tienen copartícipe alguno. Y atestiguo que Muhammad es Su siervo y Mensajero. ¡Allah! Bendice a Muhammad, a su familia, a sus compañeros y a todos los que siguen su guía hasta el Día del Juicio Final.
¡Hermanos en Allah!, os aconsejo, igual que a mí mismo, en el temor de Allah.
Hermanos musulmanes, sabed que una de las mejores mercedes que Allah nos ha agraciado es ser guiados a la fe y aferrase a ella. Sabed que la cúspide de las mercedes divinas es ser musulmanes, es ser de la mejor nación y ser seguidores del mejor entre los Profetas y Mensajeros de Allah. El Corán dice: Dios agració mucho a los primeros creyentes, los que acompañaron al Profeta, pues les envió un Mensajero de entre ellos mismos, que les recita los signos de la Escritura, que les purifica de toda mala creencia y les enseña la sabiduría del Qur'an y la Sunna. Ciertamente, antes del mensaje vivían en la ignorancia, la perdición y la confusión. (3:164). Sabed que es una gracias divina ser musulmanes. La gente vivía de un modo errante: Le asociaban a Allah otras divinidades, adoraban ídolos que no traían beneficios ni quitaban daños, cortaban los lazos de sangre, humillaban a las mujeres, asesinaban a niñas, apoyaban al fuerte y no al débil, etc. Cuando apareció el Islam junto al Profeta Muhammad, la paz sea con él, ahí comenzó la invitación a la adoración de Dios Único. Toda persona sensata siguió al Profeta Muhammad. Primero fueron sus compañeros, que Dios esté complacido con ellos. Los compañeros siguieron los pasos del Profeta, amaron al Profeta y él los amó a todos. Los compañeros transmitieron el Mensaje del Profeta y gracias a Dios el asunto siguió así de una generación a otra hasta nuestros días.
Que Allah otorgue el bien a nuestro Profeta Muhammad.
Siervos de Allah, sabed que amar al Profeta Muhammad es uno de los requisitos de la fe. Se ha citado que Anas Ibn Malik, que Allah esté complacido con él, relató que el Profeta, dijo: “Ninguno de vosotros es un verdadero creyente hasta que me ame más de lo que ama a sus hijos, a sus padres y a toda la gente”. (Bujari). Amar al profeta Muhammad es una razón para poder saborear la verdadera fe. El Profeta dijo: hay tres cosas que quien las tiene, encuentra el dulzor de la fe (del iman): que Allah y Su Mensajero sean amados por él, por encima de cualquier otra cosa… (Muslim).
Amar al Profeta te lleva a estar junto a él en el Paraíso. El Profeta contestó al ser consultado por uno de sus compañeros que dijo: amamos a nuestros queridos y luego los dejaremos. El día del Juicio Final seremos resucitamos junto a quien amamos. Contestó el Profeta.
Hermanos, cada musulmán dice amar al profeta Muhammad, pero: ¿Acaso es cierto? o ¿decimos amar al Profeta sin seguir sus pasos?
Para saber si realmente amas al profeta o no, pues, pregúntate: ¿Deseas que él estuviese ahora mismo entre nosotros o no? Sabe que lo más duro para los compañeros era la pérdida del Profeta Muhammad. Omar Ibn Al jattab, conocido por su valentía y fuerza, se quedó atónito al enterarse de la muerte del Profeta. Se levantó con la espada en mano diciendo que quién dijera que Muhammad había muerto, le cortaría la cabeza. Fue Abu bakr quien le confirmó la muerte del Profeta diciendo a todo el mundo: “Si habéis estado adorando a Muhammad, sabed entonces que Muhammad ha muerto. Pero si, por el contrario, habéis estado adorando a Dios, tened la certeza de que Dios es El Viviente y no morirá jamás”.
Lo máximo que un amante anhela es ver a la persona amada. Es común ver eso incluso en nuestros días en que se puede ver a los enamorados ofrecer todo lo valioso para ver al amado y ganar su aceptación.
Sabed que no veremos a nuestro Profeta Muhammad, si decimos amarle y no seguir sus pasos y su Sunnah. Cada vez que nos alejemos de su Sunnah nos alejamos del profeta Muhammad el Día de la Resurrección. No beberemos de su Estanque y seremos alejados de él. El Profeta dirá: “Ellos son de los míos. Y dirán: No sabes lo que han hecho después de ti. Y el Profeta dirá: ¡Ay del que cambie (su religión) después de mí!”.
Escucha bien este hadiz: Rabiah Ibn Kaab Al Aslami dijo: pernoctaba en la casa del profeta, le preparaba el agua para la ablución, etc… el Profeta me dijo: Rabiah, pídame algo (quería recompensarle). Quiero estar a tu lado en el Paraíso. Dije. El Profeta dijo: algo más. Rabiah contestó: no. El Profeta Muhammad dijo Que te prosternes mucho para acompañarme en el Paraíso. (O sea que el hombre rice). (Muslim).
Así fueron los que decían amar al Profeta.
¿Nosotros amamos al Profeta? ¿Acaso hemos obedecido sus orientaciones y hemos dejado de lado nuestros falsos deseos?
¿Acaso nos ponemos tristes por haber perdido los años sin obediencia real a él o nos sentimos más tristes por la pérdida de dinero y familiares?
Cierta vez preguntaros a Ali Ibn Abi Talib, que Dios esté complacido con él: ¿Cómo era vuestro amor al Profeta? dijo: Amábamos al Profeta más que nuestros bienes, que nuestros hijos, que nuestros padres y madres, que el agua fresca teniendo mucha sed…
Siervos y hermanos del Mensajero de Allah: ¿Os sorprende: “hermanos del Mensajero de Allah”? Sabed que cierta vez el Mensajero dijo a sus compañeros: desearía ver a mis hermanos. Sus compañeros dijeron: ¿Acaso no somos tus hermanos, Mensajero de Allah? Dijo: sois mis compañeros. Mis hermanos son quienes creerán en mí sin haberme visto.
Hermanos, este es el amor de verdad y debemos seguir el método profético para llevar su mensaje a todo el mundo.
Es lamentable y penoso ver que mucha juventud musulmana de ambos sexos sabe apenas el nombre del Profeta.
¿Acaso sabéis que estamos en el mes en que nació, fue enviado, emigro y murió nuestro Profeta?  ¿Saben nuestros hijos que estamos en el mes de RABIULAWAL? Es un mes en que ha pasado el Profeta del Islam por muchos sucesos en el camino de Dawah.
¿Saben los musulmanes que muchos hijos musulmanes memorizan el calendario occidental como su nombre, memorizan los días festivos y el falsamente denominado “Navidad” y no saben de la historia del Islam y del Profeta Muhammad?
Hermano en Allah, Sabe que debes educar a tus hijos islámicamente, sabe que Allah te va a preguntar acerca de ello, el Día de la Resurrección. Esfuérzate para que amen al Profeta más que a ti, más que a sus madre y más que el mundo.
Siervos de Allah, la gente en el mes de RABIULAWAL, en que nos encontramos, se divide en dos: musulmanes exagerados en el amor al Profeta y otros alejados de su Profeta.
En cuanto a los primeros, ellos hacen fiesta y toman el natalicio del profeta como tal. Adoran a Allah en ese día y realizan actos indebidos desde el punto de vista del Islam y con ello contradicen el método profético y sus seguidores.
En cuanto a los alejados de su Profeta. Ellos no se preocupan por nada, ni estudian la vida del profeta, ni siguen su método.
Para ser equitativos, los musulmanes debemos estudiar la vida del Profeta junto a nuestros hijos, hermanos, familiares y otros. Debemos hacerlo sin celebraciones especiales y asuntos que ni el Profeta ni sus compañeros hicieron.
Sabed que nuestras fiestas son dos y nada más. El musulmán no puede innovar e inventar lo que no es del Islam.
Que Allah haga que amemos al Profeta Muhammad y que incremente nuestro amor a él. Que nos haga vivir de acuerdo a la Sunnah del Profeta y que la muerte nos llegue aferrados a esta Sunnah. Que seamos acompañantes del Profeta en el Paraíso. Amén.
Ruego y Súplicas a Dios