miércoles, 2 de abril de 2014

A TODO MOMENTO / Dr. Sami El Mushtawi

Es sorprendente la situación de los que van en busca del Corán solamente en los momentos difíciles en los que atraviesan. Si se caen presos, ves el Corán en sus manos durante los alegatos. Por qué no lo leyeron antes de caerse presos, por causas inmorales, estafas, etc. Por qué solamente se lee el Corán en los momentos tristes, ante un moribundo, durante el sepelio y unos cuántos días después de la muerte de un ser querido. Por qué aparece solamente en los momentos sombríos de nuestra vida. Quiera Dios que esta actitud llegue a su fin y que vuelva el Corán a ser nuestra compañía día y noche y en cada momento.