La buena moral es parte de la fe, por eso, el Profeta Muhammad dijo: “Por cierto que la persona que tiene un buen comportamiento alcanza el grado del ayunante que además de ayunar todo el día reza por las noches”.
El Islam instruye al musulmán y le dice que debe hablar con educación en todo momento y proferir buenas palabras.
El Profeta dijo: “Hablar de una manera cortés es una obra de bien”. No solamente esto, sino el musulmán es también recompensado por el simple acto de sonreír, que no implica ninguna carga para él. El Profeta dijo: “Sonreírse a tu hermano es una obra de bien”.